Tuesday, November 29, 2005

Sunset

Duelen las tardes,
las tardes todas y el anhelo incierto de un tiempo compartido junto al mar.
Duelen los parajes calmos
la angustia que se mece y es siempre la misma, aún en la orilla.
Duele
la soledad que no se acepta,
el silencio en el que nace esa única mirada necesaria,
distante hoy...
Duele
trastabillar a corazón completo,
amar por vez primera sin caricias de tiempo en lo poco que queda.
Duele
lo que es tan solo corazón que se sabe hoy de un único dueño.
Duele porque él no lo sabe, a pesar de la claridad de mis cartas, de mis líneas impares.
Duele porque nunca respondió que confiaba en mí, y esa fe sigue siendo la única palabra necesaria.
Duele porque no me busca, porque hoy comprendí que esta lejos y agonizo.
Duele porque aún no me abraza, porque tarda y se detiene en multitud de viajes y demoras.
Esta tarde duele, como duelen las puestas de sol que no hemos visto juntos, la posibilidad dormida, esperanzada qué se yo...de alguna vez, qué se yo...
de alguna vez, quién sabe...