Publicar un libro de poemas después de varios años de silencio es un acto que llama mi atención y moviliza mis expectativas sobre diferentes escritores. El viernes pasado, Renato Sandoval hizo lo propio en la hermosa Galería Dédalo de Barranco y presentó su nuevo hijo: Susuki Blues. El agradable ambiente, la buena compañía, la calidez de sus familiares, amigos, invitados y de toda aquella gente interesada en el quehacer poético que asistió al evento, hicieron de la noche un tiempo memorable para este nuevo nacimiento de acompasados encabalgamientos.He leído su libro y sigo releyendo algunos poemas desde esa misma noche. Ahora mismo, no puedo dejar de colocar uno de los varios poemas que se van conviertiendo en mis preferidos. Lo cuelgo aquí al modo de los amigables "anzuelos" que coloca José Antonio Galloso en su interesante y recién descubierto blog. A ver si se animan a leer el libro azul. Bienvenida sea la música y tu poesía Renato, es un prodigio saber que todavía no se apaga. Mis saludos desde aquí.
¿Qué rostro tenías antes de nacer?
¿Mirabas ya el mío agazapado en tus ojos?
¿Era el de un tráfico nocturno que se internaba
en los bosques níveos e insomnes?
¿Un calvero en plena encrucijada de metros y tranvías?
¿La pregunta suspendida en el cadalso de la noche?
¿Eras tú?
(Shunoku)
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